¿Notas tu piel más apagada, sin luz o con falta de vitalidad? Con el paso del tiempo, los cambios hormonales, el estrés, la contaminación o incluso la climatología pueden alterar el equilibrio natural de la piel y hacer que pierda su frescura.
Elegir la crema adecuada es esencial para devolverle la luminosidad, elasticidad y confort que necesita. No todas las pieles son iguales ni tienen las mismas necesidades: hidratar, nutrir o revitalizar son acciones distintas que requieren fórmulas específicas.
Descubre cómo identificar qué le falta realmente a tu piel y elige el tratamiento que mejor se adapte a ti para recuperar un cutis radiante y lleno de vida.
¿Notas tu tono apagado, como grisáceo?
Si notas tu piel mate, cetrina, sin vida y reseca… y además empiezan a aparecer algunas manchitas. Las manchas suelen afectar sobre todo a pieles mates que se broncean fácil y a partir de los 35 años.
🌿 Tu crema ideal debe igualar el tono, difuminar las manchas y aportar luminosidad.
🌿 Utiliza a diario crema con protección UVA y UVB para frenar la aparición de manchas.
🌿 Antirradicales libres y antiinflamatorios, como la vitamina E o la granada, para reducir la inflamación provocada por los rayos UV.
🌿 Hidroxiácidos. Las limpiadoras y las hidratantes con activos ligeramente exfoliantes mejoran la eficacia de las despigmentantes y hacen que la piel se vea luminosa.
🌿 Crema despigmentante. Úsala por la noche.
🌿 Activos aclarantes, como el regaliz, el ácido kójico, la vitamina C o el glutatión.
🌿 Si el problema no son las manchas sino únicamente la luminosidad que has ido perdiendo, es recomendable aplicar a diario un sérum o crema iluminadora. Mejor con activos que favorecen la microcirculación (cafeína, ginseng) y alisan (ácidos frutales), y pigmentos que reflejan la luz que llega al rostro.
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