En exceso, los residuos tóxicos no solo provocan falta de vitalidad e hinchazón, también pueden agravar enfermedades como artritis, acné, cefaleas… e incluso, afectar al ánimo.
Con curas depurativas te sentirás más ligero y con más energía y mejor humor.
– Empieza el día tomando té blanco con limón
Tus órganos de eliminación trabajan sin descanso para deshacerse de las sustancias de desecho. Tomar té blanco en el desayuno, el menos procesado de todos, activa los riñones, el hígado y el intestino. Si retienes líquidos puedes agregar zumo de limón y ralladuras de su piel. Este cítrico actúa como un gran desintoxicante y depurativo natural.
– Licuado de apio, pepino y tomate de aperitivo
Si a la incómoda sensación de hinchazón se le suman los kilos de más, toma antes de cada comida principal un licuado de apio, pepino y tomate. Esta bebida ligera, diurética y saciante te ayudará a perder peso. ¿Sabías que el tejido graso actúa como un almacén de toxinas? Quemar grasa es, por lo tanto, una magnífica forma de acelerar la eliminación de sustancias nocivas.
– Tu infusión: Té de java
Este potente depurativo herbal baja los niveles altos de urea y ácido úrico producidos por los excesos de alcohol, carne roja, embutidos, marisco, etc. Añade una cucharada de esta planta por taza de agua hirviendo, deja reposar unos 8-10 minutos y filtra.
Si la mezclas con diente de león, zarzaparrilla y bardana, mantendrás el acné y la celulitis a raya.
– Saca provecho al efecto barrido de la alcachofas
Si tus digestiones son cada vez más pesadas y, a menudo, sufres hinchazón abdominal o dolores de cabeza, opta por la alcachofera en infusión. Combate la retención de líquidos, purifica la piel y estimula al hígado. Incluir alcachofas a tus recetas es otra buena medida, debido a que este alimento favorece el equilibrio de la flora intestinal.
