Detrás de muchos dolores de espalda se esconden hábitos cotidianos:
– El móvil. Inclinar la cabeza para mirar el móvil es dañino para tu cuello. Además, tendemos a echar los hombros hacia delante causando una mayor tensión cervical.
Corrígelo: Usa el móvil poniéndolo a la altura de los hombros para no bajar la mirada. El cuello debe estar erguido y los hombros relajados y hacia atrás.
– Llevas mucho peso encima. Tu bolso no debería pesar más de un 10% de tu peso corporal (por ejemplo si pesas 50 kilos no deberías cargar con más de 5 kilos).
Corrígelo: Si tienes que llevar mucho peso opta por mochila en lugar de bolso, mejor de asas anchas, y procura que el peso quede en el centro de la espalda.
– Tipo de calzado. Las plataformas con una inclinación pronunciada causan a tu espalda un daño similar al de unos zapatos de tacón de aguja.
Corrígelo: Las mejores opciones son plataformas rectas, tacones entre 2 y 4 cm y zapatos que sujeten la parte anterior del pie.
– Tecnología en la cama. Revisar tu móvil o tablet tumbado con el dispositivo en el regazo es una de las posturas más perjudiciales debido a la gran tensión muscular que causa en el cuello.
Corrígelo: Al menos pon un cojín bajo las rodillas para relajar la musculatura de la espalda, eleva la cabeza con la ayuda de una almohada, no inclines demasiado el cuello y mantén los codos apoyados en la cama.
– Aire acondicionado. Si el aire frío cae directo sobre la espalda, te contraes de forma inconsciente para retener el calor, produciéndose contracturas y tortícolis.
Corrígelo: Lleva a mano una prenda para cubrirte en los lugares donde el aire es excesivo (oficina, transporte público, tiendas…)
– Iluminación. Una mala iluminación en tu mesa de trabajo, además de dañar tu vista, te obliga a inclinarte hacia delante y torcer la columna para ver mejor.
Corrígelo: La posición ideal al sentarnos nos debe permitir tener la espalda alineada, las rodillas más altas que las caderas y un respaldo que sujete el tronco.
– Utilizar una talla de sujetador incorrecta. Si utilizas una talla más pequeña se clava en los hombros y adoptarás posturas poco naturales. Si te va grande no sujetará bien e irás inclinada hacia delante.
Corrígelo: Mide el contorno torácico justo por debajo del pecho, tu talla es el valor que obtengas (85, 90…) Y mide tu pecho por el centro y réstale lo que mide tu contorno, el resultado es tu copa (A:12-14 cm; B: 14-16 cm; C: 16-18 cm; D: 18-20 cm; E: 20-22 cm)
LA IMPORTANCIA DE CAMINAR ERGUIDO
La postura es muy importante. Evita caminar con la espalda encorvada, los hombros hacia delante y mirando hacia el suelo. Camina con el vientre contraído, la espalda recta, los hombros ligeramente echados hacia atrás y mirando al frente.
Resulta muy beneficioso para la espalda hacer yoga o ejercicios de pilates. Te ayudarán a alinear la columna vertebral y fortalecer la musculatura de la espalda.
