Los secretos para una manicura perfecta son básicamente tres: hidratar las uñas cada día, aplicar una base y sellar con un finalizador siempre que te las pintes.
Las uñas merecen unos cuidados específicos, igual que la piel del rostro o el cabello. Por norma general, hay que hidratarlas cada día porque su principal problema es la sequedad. Y, si están débiles, aplicar productos con calcio o endurecedores. Sigue leyendo