CAUSAS DEL ACNÉ DESPUÉS DE LA ADOLESCENCIA

Aunque esta enfermedad de la piel se asocia a la pubertad, también puede aparecer a partir de los 24 años e incluso entre los 35 y los 40 años. De hecho, en los últimos años, se registra una mayor incidencia del acné adulto en las mujeres.

El acné es una inflamación de las glándulas pilosebáceas que obstruye los poros, lesiona la piel y puede derivar en una infección. La cara suele ser la zona más afectada, aunque puede aparecer en la espalda y en el pecho.

Existen dos clases de acné en la mujer adulta: el denominado acné persistente porque permanece más allá de la adolescencia y aquel que aparece de nuevo.

LAS CAUSAS

Las hormonas como los estrógenos y la progesterona suelen ser las principales responsables de estos brotes de acné. También el cortisol, la hormona que se dispara durante episodios de estrés puede desencadenarlo. El uso de ciertos cosméticos más grasos, el tabaco o una dieta rica en alimentos azucarados o derivados lácteos también pueden ser el origen del acné después de la adolescencia. Otra causa es la toma de anovulatorios o el abandono de los mismos, lo que crea desajustes que pueden derivar en un episodio de acné.

El síndrome del ovario poliquístico puede ser el origen. Entre un 5 y un 15% de mujeres en edad reproductiva ser ve afectada por este trastorno hormonal y endocrino. Se caracteriza por la acumulación de óvulos en proceso de maduración y una producción expresiva de testosterona. Entre sus muchos síntomas está el acné denominado hormonal, localizado en mentón, contorno de la mandíbula, cuello, parte alta de la espalda…

La solución para inhibir la bacteria del acné y tratar la inflamación de la glándula sebácea dependerá de qué lo ha producido y de la intensidad del brote.

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