Ante un pelo quebradizo, seco o sin brillo, averigua qué lo deteriora y como recuperar su vitalidad. Puede haber estado expuesto a diferentes tipos de daños:
. El brushing extremo. Sobre todo cuando el pelo está aún mojado o enredado, rompe las escamas levantadas del pelo y termina por producir las temidas puntas abiertas.
. Los factores ambientales como el frío, el sol e incluso la contaminación, a los que estamos expuestas constantemente, afectan a la cutícula, que suprime gradualmente la proteína de queratina del cabello.
. Cambios de color. Las mechas o modificar su estructura natural con permanentes eliminan la capa de protección innata y su capacidad de retener la humedad, ya que actúan químicos que debilitan y vuelven más frágil y delicada nuestra melena.
. El calor excesivo de la plancha, el secador o las tenazas es otras de las causas que lleva al cabello a estropearse. La corteza superior se fractura y pierde así su capacidad de conservar las proteínas y vitaminas.
Debemos evitar algunos errores al utilizar la plancha para que nuestro cabello sufra menos:
. Nunca se debe usar sobre el cabello húmedo o mojado porque aumentan la temperatura del agua interior de la fibra capilar hasta llevarla a ebullición y convertirla en vapor, rompiéndola sin remisión.
. Si el cabello está coloreado siempre hay que disminuir la temperatura porque el calor merma el brillo y hace que la intensidad del tono pierda tonacidad.
Modula la temperatura de la plancha según el grosor de tu pelo; Si tu cabello es muy fino no la aumentes mucho más de 120 grados, para un cabello de grosor medio 160 grados es una temperatura adecuada y para cabello muy grueso o rizado la temperatura puede llegar a 200 grados.
. Hay que realizar siempre pasadas suaves y continuas, de raíz a puntas, sin entretenerse en ningún punto en concreto.
Divide tu cabello en mechones muy finos para pasar después la plancha por cada uno de ellos. Procura pasarla una única vez por cada mechón, y en caso de tener que pasarla una segunda vez, procura no hacerlo hasta que el mechón no se haya enfriado de nuevo.
La zona de las puntas es siempre la que está más dañada ya que ha soportado agresiones por más tiempo, así que un bueno truco para no dañarla más es pasar la plancha solo desde la raíz hasta la parte media del cabello.
Ante un cabello dañado será necesario sellar las puntas y utilizar productos fortificantes, con acción antirotura.
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