El ácido hialurónico es un carbohidrato que se encuentra de forma natural en nuestro organismo, mayoritariamente en la piel, que contiene el 50% del ácido hialurónico de todo nuestro cuerpo. Cada día, el cuerpo humano degrada y vuelve a sintetizar aproximadamente un tercio de todo el ácido hialurónico que contiene.

Se trata de un componente fundamental de la matriz extracelular de nuestra piel que se va perdiendo con la edad, las hormonas y la exposición al sol entre otros factores. Nuestros niveles de ácido hialurónico son máximos en la infancia y van disminuyendo con los años. A los 40 años, las reservas pasan al 50%, y después de los 60 años sólo queda un 10% en nuestro cuerpo. Con la edad, las células no solo producen menos ácido hialurónico, además, éste resulta ser de menor peso molecular.

El ácido hialurónico se ha convertido en un activo indispensable en cosmética gracias a su alta efectividad y tolerancia.

Este activo regenera la piel combatiendo los signos más significativos del envejecimiento:
Deshidratación, líneas de expresión y arrugas, pérdida de firmeza y elasticidad, tono irregular y apagado, rasgos marcados y signos de fatiga.

El ácido hialurónico se emplea para “refrescar” el rostro, pues lo hidrata en profundidad y mejora su tono, su luminosidad y su textura.

Sus funciones en la piel:

– Es esencial en la estructura e integridad de la matriz dérmica.
– Higroscópico: capta y retiene el agua para mantener los niveles de hidratación.
– Aumenta la presencia de ácido retinoico natural, lo que aumenta el nivel de hidratación.
– Inhibe la colagenasa, y, con ello, la degradación del colágeno que es una de las principales causas de flacidez cutánea.
– Estimula la producción de colágeno mediante el esponjamiento de los fibroblastos, las células que fabrican esta fibra de sostén.
– Ayuda a una buena distribución de las fibras de colágeno.
– Favorece (junto a otros proteoglicanos) la constitución de un adecuado soporte donde se asientan las células.
– Su presencia en el tejido epitelial potencia la proliferación de queratinocitos y, con ello, la renovación celular.
– Imprescindible para una correcta circulación intercelular de los nutrientes.
– Estimula la proliferación de los factores de crecimiento y, con ello, facilita los procesos de regeneración y cicatrización
– Es perfecto como material de relleno gracias a su alta tolerancia.

No solo es el mejor “atrapa-agua” que existe. Además, ha mostrado excepcionales cualidades para la creación de colágeno y la reparación cutánea.

ÁCIDO HIALURÓNICO EN POLVO: VER EN TIENDA

ÁCIDO HIALURÓNICO LÍQUIDO BIO: VER EN TIENDA

SÉRUM FACIAL ÁCIDO HIALURÓNICO. Reduce visiblemente las arrugas, aumenta la firmeza y revitaliza la piel: VER EN TIENDA

CREMA FACIAL ÁCIDO HIALURÓNICO. Proporciona a la piel una hidratación profunda y equilibra la pérdida de humedad: VER EN TIENDA

CREMA FACIAL ANTIARRUGAS CON ÁCIDO HIALURÓNICO. Crema facial con ácido hialurónico y con protector del ADN celular, que proporciona un efecto antiarrugas, antiradicales libres y retardador del envejecimiento de manera inmediata: VER EN TIENDA

CREMA FACIAL REAFIRMANTE DERMA AGE+. Fortalece las fibras de soporte de la piel aportando colágeno y elastina cuya cantidad y calidad disminuyen con el paso del tiempo. Contiene Ácido Hialurónico, Colágeno…: VER EN TIENDA

CREMA FACIAL DIAMOND SUN COLOR. Aporta un color natural que realza el brillo cutáneo, hidratando en profundidad y sustituyendo el uso del maquillaje. Con ácido hialurónico y ceratonia siliqua, los cuales hidratan en profundidad: VER EN TIENDA

todocremas.com