Después de todo el trabajo y las actividades del día nuestra cara acumula mucha tensión. Además de favorecer la circulación y atenuar o retrasar la aparición de arrugas, los masajes faciales pueden relajar tu rostro y disminuir tu nivel de estrés.
Relaja los rasgos, elimina tensiones y consigue un rostro más descansado con este sencillo automasaje facial. Solo tienes que repetir estos sencillos gestos cada día durante 15 segundos cada uno:
Frente sin Arrugas
Apoya la frente en las palmas de las manos dejando recaer sobre ellas el peso de la cabeza. Previene y alisa las líneas de expresión de esta zona.
Ojos más descansados
Frota las manos intensamente durante unos segundos y ponlas, ahuecadas, sobre los ojos. El calor relajará estos y su contorno.
Pómulos arriba
Junta las manos y ponlas sobre la nariz. Desplázalas suavemente y con movimientos lentos hacia las orejas. Conseguirás un efecto lifting o de “planchado”.
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