Al final del verano, nuestro cabello suele mostrar los efectos de la exposición al sol, el cloro y el calor: pierde brillo, se reseca y las puntas se vuelven finas y quebradizas. Pero no todo está perdido: con los cuidados adecuados, puedes devolverle su vitalidad y hacer que vuelva a lucir sano y radiante. 🌿
Por qué se estropea el cabello
Los rayos solares deshidratan la fibra capilar y la debilitan, mientras que el cloro altera la capa protectora natural del cabello. Si además se utilizan herramientas de calor (secador, plancha, rizador) o tratamientos químicos como tintes y decoloraciones, el cabello pierde sus nutrientes y defensas, volviéndose frágil y sin vida, especialmente en las puntas.
Lava tu cabello con mimo
El lavado puede convertirse en un auténtico tratamiento de belleza si eliges los productos adecuados a tu tipo de pelo.
Recuerda que el exceso de grasa asfixia el cuero cabelludo y debilita la raíz, por lo que es importante utilizar agua tibia y aclarar a fondo para eliminar residuos.
Hidratación: la clave para sellar las puntas
Las puntas abiertas aparecen cuando la cutícula —la capa externa del cabello formada por células de queratina— pierde los lípidos que la mantenían unida. Rehidratar el cabello ayuda a reconstruir estas escamas y previene nuevas roturas.
Elige productos capilares con activos reparadores como aceite de coco o aceite de argán.
Aplica el acondicionador solo en medios y puntas, déjalo actuar unos minutos y realiza el último aclarado con agua fría para sellar la cutícula.
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Después, envuelve el cabello en una toalla de algodón y deja que absorba la humedad sin frotar.
Secado y peinado sin daños
Evita frotar o retorcer el cabello para secarlo. Es preferible presionar suavemente la toalla de arriba hacia abajo. Este gesto previene los enredos y evita que la cutícula se abra, reduciendo el riesgo de rotura, sobre todo en cabellos finos o dañados.
Para desenredar, utiliza un peine de púas anchas y comienza siempre desde las puntas hacia la raíz, avanzando poco a poco para no quebrar el cabello.
Tratamientos de choque para reparar
Cortar las puntas abiertas mejora el aspecto visual del cabello, pero no soluciona el problema de fondo. Tu melena necesita nutrientes y reparación profunda.
Las mascarillas nutritivas con aceite de coco, ricino, proteínas, vitaminas y queratina ayudan a revitalizar el cabello, restaurar su estructura y mejorar su textura.
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Además, algunos aceites vegetales pueden ser verdaderos elixires capilares: unas gotas de aceite de almendras, argán, oliva o aguacate aplicadas en medios y puntas devuelven la suavidad, el brillo y la protección natural del cabello.
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Por último, no olvides incorporar un serum reparador a tu rutina. Los que contienen proteínas, colágeno y D-Pantenol fortalecen la fibra capilar, aumentan la hidratación y sellan la cutícula, dejando el cabello visiblemente más sano y luminoso.
