La piel que rodea los ojos y los labios es mucho más fina y delicada que la del resto del rostro. Justamente por eso, necesita productos específicos, gestos suaves y mucha constancia en el cuidado. Si los tratas bien, estas áreas no solo se verán más bonitas y luminosas, sino también más jóvenes y protegidas.
👁️ Contorno de ojos: mimos que se notan
El contorno de ojos es una de las primeras zonas en reflejar el cansancio, el estrés y la deshidratación. Para cuidarlo correctamente:
🔹 Desmaquilla con suavidad.
Evita frotar o arrastrar. Usa una leche limpiadora para ojos sensibles o agua micelar específica, aplicándola con un disco de algodón distinto para cada ojo.
🔹 Hidratación específica.
Elige productos de textura fluida, ligeros e hipoalergénicos. Ingredientes como la alantoína son grandes aliados: regeneran, calman y mantienen la piel suave e hidratada.
🔹 Precaución extra.
Cuando apliques tu crema facial, evita extenderla hacia el contorno. Esta zona es tan sensible que incluso los restos de productos no diseñados para ella pueden provocar irritación o reacciones.
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💋 Labios: delicados y expuestos
Los labios carecen de glándulas sebáceas, por eso tienden a resecarse con facilidad. Para mantenerlos suaves, jugosos y protegidos:
🔹 Bálsamo labial, mañana y noche.
Especialmente por la noche, cuando la piel se regenera con mayor intensidad.
Evita productos con glicerinas o parafinas, ya que pueden deshidratar a largo plazo.
🔹 Protección solar, siempre.
El sol también afecta a los labios. Usa un protector con SPF 20 o más, y reaplica varias veces al día si estás al aire libre.
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No olvides que los detalles marcan la diferencia. Incorporar estos cuidados en tu rutina diaria puede transformar por completo el aspecto de tu mirada y tu sonrisa. Dale a tus labios y contorno de ojos la atención que merecen: pequeños gestos, grandes resultados.
