Cuando hace buen tiempo, los pies se convierten en protagonistas. Las sandalias, las chanclas o simplemente el placer de ir sin calzado invitan a mostrarlos… pero ¿están realmente listos?
Aunque sostienen nuestro peso a diario, muchas veces nos olvidamos de cuidarlos hasta que llega el verano. Es momento de devolverles toda la atención que merecen. Aquí tienes una rutina completa para mimarlos, rejuvenecerlos y lucirlos con total libertad.
Exfolia, hidrata y suaviza
Durante el invierno, es común que se acumulen células muertas y durezas, especialmente en los talones, plantas y dedos. No es casualidad: la piel de los pies puede llegar a ser un 50% más gruesa que la del rostro.
Para eliminar estas imperfecciones:
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Usa piedra pómez después de la ducha, realizando movimientos circulares en las zonas más engrosadas.
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Nutre intensamente con aceite de coco o con una crema específica para pies que contenga ingredientes reparadores como manteca de karité, urea o ácido hialurónico.
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Hazlo cada noche antes de acostarte con un suave masaje: mejorarás la hidratación y evitarás la aparición de grietas, muy comunes con el uso de calzado abierto.
Uñas impecables
Una pedicura bien hecha puede transformar por completo el aspecto de tus pies. Sigue estos pasos para un resultado profesional en casa:
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Corta y da forma. Las uñas deben recortarse rectas y cuadradas para evitar que se encarnen. Después, lima con una lima de cartón para igualar los bordes.
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Cuida las cutículas. Sumerge los pies en agua tibia durante unos minutos y empuja suavemente las cutículas con un palito de naranjo. No las cortes.
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Alisa la superficie. Con el paso del tiempo, pueden aparecer estrías en las uñas. Aplícales un producto alisador para devolverles un aspecto uniforme y juvenil.
Esmaltes para todos los gustos
Una vez preparada la uña, toca darle color:
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Tendencia “milky nails”. Esta temporada se imponen los tonos suaves y naturales como el blanco porcelana, marfil, rosa bebé o beis. Aportan un acabado pulido y elegante.
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Realza tu bronceado. Para destacar el dorado de tu piel, opta por tonos vibrantes como coral, salmón, melocotón, rojo, fucsia, rosa neón, verde menta o azul turquesa.
💡 ¿Quieres que el esmalte dure más tiempo?
Prepara bien la uña: empuja cutículas, pule la superficie y límpiala con alcohol. Luego aplica:
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Una base protectora.
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Dos capas finas de esmalte.
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Un “top coat” sellador.
Para un acabado de larga duración, apuesta por esmaltes semipermanentes. Y no olvides hidratar tus uñas cada noche.
Di adiós a los efectos del calor
El calor no solo afecta la piel del rostro o el cuerpo, también puede causar hinchazón en pies y tobillos. ¿Cómo evitarlo?
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Baños drenantes. Remoja tus pies en agua fría con sal gruesa y unas gotas de aceite esencial de menta. Refresca, activa la circulación y alivia la retención de líquidos.
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Masajes ascendentes. Después del baño, masajea con aceite de árnica o de centella asiática.
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Piernas en alto. Recuéstate y apoya las piernas contra la pared unos minutos: ¡es mano de santo!
Protección solar también para los pies
Los empeines suelen quedar expuestos al sol, sobre todo al usar sandalias o ir sin calzado. Protege esa zona con un fotoprotector en gel, ultraligero, de rápida absorción y resistente al agua y al sudor. Así evitarás quemaduras y el envejecimiento prematuro de la piel.
Este verano, no escondas tus pies. Dedicarles un poco de atención es todo lo que necesitas para lucirlos bonitos, sanos y cuidados. ¡Haz que se conviertan en el complemento estrella de tu look!
